Los datos oficiales muestran que el salario promedio de los trabajadores formales ha caído por debajo del umbral de la línea de pobreza, marcando un hito preocupante en la economía del país. Esta situación ha sido impulsada por el aumento constante de los precios, que ha superado con creces la capacidad de los salarios para mantener el poder adquisitivo de los trabajadores.

En enero de este año, el valor de una Canasta Básica Total (CBT), que representa el costo de cubrir todas las necesidades básicas de una familia de cuatro personas, alcanzó los $596.823. Mientras tanto, la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) reportada por la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social ascendió a $555.269 en el mismo mes. Esto significa que, en promedio, los trabajadores formales tienen ingresos inferiores al costo de la CBT y, por lo tanto, se encuentran por debajo de la línea de pobreza.

Es importante destacar que esta situación no implica necesariamente que todos los trabajadores formales estables sean considerados como pobres, ya que la medición de la pobreza se basa en el nivel de ingreso familiar. Sin embargo, sí indica una tendencia preocupante en la que los salarios no están siendo suficientes para cubrir las necesidades básicas de las familias.

Además, si se considera el salario neto después de descuentos, la brecha entre los ingresos y el costo de la CBT es aún mayor. El salario neto promedio de enero fue de $460.873, que incluso está por debajo del costo de la CBT para una familia de solo tres personas ($475.140).

Esta situación ha llevado a un aumento en la cantidad de personas que, a pesar de tener un empleo, están buscando activamente otro trabajo para mejorar sus ingresos. Se estima que hay cerca de 3 millones de ocupados demandantes en el país.

Los expertos señalan que esta situación tiene graves repercusiones en la economía, ya que deprime el consumo y contribuye a potenciar la recesión. Sin embargo, algunos analistas sugieren que mantener la disciplina fiscal y reducir las tasas de interés podrían ayudar a contener la inflación y eventualmente permitir una recuperación económica.

En resumen, los datos oficiales muestran que el salario promedio de los trabajadores formales está por debajo del umbral de la línea de pobreza, lo que indica una situación preocupante en la economía del país y la necesidad de medidas para mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores.